No soy buena.
Quiero un amor como el de Amy y Blake. Un amor drogadicto y destructivo. Meterme un pico con mi chica en el camerino entre canción y canción. Pasear de la mano entre flashes de periodistas desalmados. Cada día más borrachos, cada día más delgados. Aspirar la niebla de Londres mientras ella escribe canciones en la ventana. Que me encarcelen y tú te vayas con otro. Morir por amor.
Este poema va dedicado a Amy Winehouse, a su jazz y su voz, a ella, por esa autodestrucción de mecha rápida. Hay vidas poéticas pero ninguna como la suya.
El amor es un infierno con caricias
que se convierte en cielo si te fijas en mí.
Canciones cargadas de injusticias
que cortan como un bisturí.
Sólo querías hacer arte
en conciertos herméticos.
Un pub donde emborracharte
sin lagrimear cosméticos.
Tu ojo y tu nariz se pasan de la raya
y no tienes un amigo que te ladre.
Demasiado frágil, demasiado cobaya,
me cago en el taxi de tu puto padre.
No vayas a rehabilitación,
besa la boca de cualquier botella.
La vida es un jazz buscón
que con cristales rotos pide querella.
Moño indiscreto, guitarra de cuerdas flojas,
Valerie, carnet roído, piernas abiertas.
Vaso medio lleno, papel Albal con paradojas,
hermoso jardín donde nacen flores muertas.
La mierda que corre por tu vena
hace que vivas en este cuaderno.
You know I'm no good en escena,
lo sé, por eso alegras mi infierno.
Marcos H. Herrero.
Eres tan genial que tus versos hacen bella la autodestrucción.
ResponderEliminarA ver si pillo el documental que le han hecho a la pobre Amy. Estoy viendo los capítulos de Fargo 2,¡Me encanta!
Un abrazo.
Se fue octubre con sus desamores y su destiempo, esta vez me ha enseñado el comienzo de una vida nueva, que detrás de este dolor guardo unas ganas terribles; de vivir, de amar, de perder. Muchas gracias por tus comentarios, animan muchísimo. Me encanta Fargo, es brutal, ese humor negro negrísimo, esa bestialidad. Cuando acabes y tengas tiempo te recomiendo The Knick, de lo mejorcito que he visto. Un abrazo Karima.
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